
LA DEHESA
El cerdo ibérico no podría existir sin su hábitat natural: la dehesa. Este ecosistema, caracterizado por su combinación de pastizales y bosques de encinas y alcornoques, es el entorno perfecto para la crianza de los cerdos ibéricos en libertad.
¿Qué es la dehesa y por qué es tan importante?
La dehesa es un sistema de explotación agroforestal presente en el suroeste de España y el sureste de Portugal. Se extiende por comunidades como Extremadura, Andalucía, Castilla y León, y Castilla-La Mancha, y se ha mantenido prácticamente intacta durante siglos.
En este entorno, el cerdo ibérico encuentra su alimento natural (bellotas, hierbas, raíces y pequeños invertebrados) y el espacio suficiente para desarrollar su musculatura, lo que da lugar a una carne con una textura y un sabor inigualables.
Un modelo de sostenibilidad
Además de ser el hogar del cerdo ibérico, la dehesa cumple una función ecológica clave. Su conservación permite:
- Proteger la biodiversidad, proporcionando refugio a numerosas especies animales y vegetales.
- Regular el ciclo del agua y prevenir la erosión del suelo.
- Mantener la tradición ganadera y agrícola, generando empleo en las zonas rurales.
En definitiva, la dehesa es el corazón del mundo ibérico, un ecosistema en equilibrio donde la tradición y la naturaleza trabajan juntas para ofrecer productos de una calidad excepcional.